Ruby llegó a México hace trece años por medio de una invitación para trabajar como niñera con una familia que ya la conocía, y en ese tiempo se ha ambientado paulatinamente a nuestro medio hasta sentirse como en casa.
Concluyó sus estudios para “chef” con éxito, y actualmente labora para una familia colombiana en un establecimiento prestigiado en el que aplica sus capacidades con profesionalismo y un entusiasmo que le motiva más aún.
Vida en Colombia
Nació en el departamento de Chocó al noroeste de Colombia, que cuenta con algo menos de 600,000 habitantes.
Étnicamente el Chocó contrasta a nivel local con los promedios nacionales, ya que la estadística global de Colombia indica que el 87% de la población es mestiza y blanca, el 7% afrodescendiente y el 4% de raíces indígenas, mientras que en Chocó el 73.77% es afrodescendiente y el 15% indígena.
Tal vez esta desproporción conduzca al racismo tan marcado que Ruby percibe entre sus compatriotas y que destaca decepcionada y con algo de impotencia.
Ruby relata que en su comunidad la gente es muy alegre, aficionada al baile, amiga de la fiesta, de la buena comida y del mezcal. Lo evoca con nostalgia, la misma añoranza que la lleva a recordar su niñez rodeada de naturaleza, de vida sana a orillas del río y sus desplazamientos en canoas y barcas a los que estaba acostumbrada y eran parte de su vida.
Sin embargo, pese a que extraña a su familia y a su gente no tiene contemplado regresar; se siente bien en México y sus planes son permanecer aquí.
Gastronomía
Especialista en asuntos culinarios, dice que le gusta la comida colombiana pero también la mexicana; los sabores de los platillos más tradicionales de su patria que no puede olvidar y que conserva en la memoria intactos, aunque al mismo tiempo disfruta de la enorme variedad de la cocina mexicana que ha aprendido a degustar.
Ruby es una persona animosa y positiva, jovial, dispuesta siempre a ofrecer una sonrisa que nace de su alma candorosa y pura.
