Alexander Sveshtarov tiene muchas cualidades, entre ellas la de ser un hombre culto con una conversación amena matizada con anécdotas y datos tan interesantes como divertidos.
¿Cómo llegó a México?
Originario de Bulgaria, vino a México hace trece años junto con sus padres, que emigraron por cuestiones de trabajo.
El hecho de llegar tan joven sin duda le ayudó para adaptarse relativamente en poco tiempo a un ambiente del que poco conocía y que de momento le impactó. Según entiende, lo amistoso de la gente le hizo fácil el proceso y se siente agradecido.
Vida en Bulgaria
Nació en Sofía, la capital, ciudad de 1,270,000 habitantes ubicada en el centro de la región de los Balcanes.
Define a su país como un pequeño paraíso y siempre recomienda que vale la pena visitarlo, por su hospitalidad, sus paisajes y su arquitectura milenaria. Creo que es importante mencionar que la población total de Bulgaria es de aproximadamente nueve millones de personas, y lo señalo porque es menor al de la ciudad de México.
Con una sonrisa evocadora habla de su patria con algo de ironía, por ejemplo al señalar que allá acostumbran negar con la cabeza exactamente igual a como nosotros afirmamos, y viceversa.
De igual modo se refiere a sus costumbres, al sonido gutural de su lenguaje, a los hábitos alimenticios, a sus fiestas, al proceso que conduce a la amistad, al noviazgo, y a otros detalles no tan relevantes pero sustanciales como el de que al comprar en el mercado está mal visto el tocar la mercancía.
Destaca la gran diversidad de características físicas de la población búlgara a partir de la centenaria mezcla entre eslavos y protobúlgaros (que lleva implícitos algunos elementos iranios), que lo mismo es representada por individuos rubios de ojos claros que por personas de cabello obscuro, curiosamente de ojos claros.
Un tema lamentable que le desagrada de su patria es el referente al racismo en contra de gitanos y otras minorías, cuestión que no se ha logrado erradicar y que se transmite desde la niñez, incluso en la misma educación en el hogar.
¿A qué dedica su tiempo?
Alexander es consultor y se dedica a la enseñanza de lenguas, particularmente del inglés, el español y el búlgaro. Maneja también un canal en redes enfocado en abarcar motivos diferentes.
Es un profesional y merece mucha suerte.
