Conchita Román «Conchis MX» es una belga de genealogía española enamorada de México por sus ambientes, sus ciudades, sus paisajes, su cultura y sus costumbres tan diversas dentro de las cuales se ha adaptado y que por ahora enmarcan sus proyectos a futuro.
Bélgica
Nació en el sur de Bélgica, en la ciudad de Lieja ubicada en la región de Valonia, en donde ha vivido su niñez y primera juventud acompañada de frecuentes viajes a Granada, en España, donde viven sus abuelos.
Esa circunstancia de contacto ininterrumpido aunada a las raíces españolas de sus padres le han permitido mantener vigentes sus conocimientos de la lengua española, y en este aspecto hay algo que platica que es curioso y al mismo tiempo comprensible: “en Bélgica se me considera algo española, mientras que en España se refieren a mí como la belga”.
¿Cómo conoció México?
Vino por primera vez a México hace varios años, en el 2008, de la manera casual como se dan muchas historias. Vivía en Londres por aquel entonces, donde estudiaba inglés, y una compañera inglesa la invitó a viajar a Mérida por supuesto en plan turista.
Se hizo el viaje, y el resultado fue que se enamoró de Yucatán y que se propusiera fervientemente regresar, lo cual evidentemente hizo cuando se le presentó la coyuntura.
Terminando sus estudios de comunicación viajó de nuevo a Mérida para hacer sus prácticas, -esa fue la coyuntura- y a partir de ahí regresó de vacaciones varias veces hasta que encontró la oportunidad de establecerse de una manera más formal.
Han pasado dos años desde entonces, se encuentra bien, vive en la ciudad de México y ahora está casada con un hombre mexicano.
¿Actividades en la Ciudad de México?
Reparte su tiempo y su talento entre impartir clases de francés y administrar un canal en YouTube de contenido pensado para informar sobre la cultura mexicana y divertir que le tiene entusiasmada.
Le gusta el baile y busca ser actriz, actividad por la que siempre ha sentido inclinación.
Buena conversadora, de trato abierto y sencillo y con una clase de gracia natural que resulta amena, seria y divertida al mismo tiempo.
